El poder de juego
El poder del juego: cómo la diversión y los juegos ayudan a los niños a prosperar
Más que una simple oportunidad para la diversión, el juego es un tema serio en lo que respecta a la salud y el desarrollo de un niño. El informe clínico de la American Academy of Pediatrics titulado, «El poder del juego: su función pediátrica para mejorar el desarrollo de los niños pequeños” muestra que jugar puede mejorar las capacidades de los niños para planificar, organizar, llevarse bien con los demás y regular sus emociones. Además, el juego ayuda con el lenguaje, las destrezas matemáticas y sociales e incluso ayuda a los niños a sobrellevar el estrés.

Ideas específicas por edad para aprender jugando
De 1 a 3 años
- Dejen que su niño tome la iniciativa y florezca su curiosidad.
- Ofrezca a su hijo bloques de construcción, envases vacíos, cucharas de madera y rompecabezas. Los objetos sencillos y poco costosos constituyen algunas de las mejores formas de fomentar la creatividad de un niño.
- Darle la oportunidad de jugar con niños de su edad supervisado por los padres.
De 4 a 6 años
- Cuente a su hijo historias y hágale preguntas sobre lo que recuerda.
- Permita a su hijo intercambiar entre juegos imaginarios y reales, por ejemplo, jugar a la casita y ayudar con las tareas del hogar.
- Limite el tiempo frente a las pantallas a un nivel saludable. Los medios adecuados para la edad pueden tener beneficios para los niños mayores.
El juego como eliminador del estrés tóxico
Además de fomentar la salud y el desarrollo de un niño, el juego ayuda a fomentar relaciones seguras, estables y provechosas que protegen contra el estrés tóxico y generan la resiliencia socioemocional.
Recuerde… Ofrecer a su hijo muchas oportunidades para jugar es una de las mejores maneras de ayudarlo a crecer y a convertirse en un adulto curioso, creativo, sano y feliz, equipado con las habilidades necesarias para nuestro mundo actual. La próxima vez que su hijo le pida que juegue con él o ella, ¡no pierda la oportunidad! Comparta la alegría del descubrimiento mientras se conectan entre sí y con el mundo a su alrededor.

Fuente: Academia Americana de Pediatría